19.10.06

Delirios de una mente que padece sus recuerdos...

Y así fue, una vida por delante sin ella. Me aterra decirlo: no la tendré más... Uno se miente a veces. Esto aflora, se te hace carne. Explota en vísceras de desesperación y te dice que no, que no la vas a tener.
Se me viene el terror de sentirlo, adentro, en la sangre.
Lo siento: siento terror cuando lo siento y cuando lo veo venir, igual, aunque no esté.
No es que me guste. Simplemente lo sé, se desvanece en acantilados letales a los que también temo.
Yo que pensé que el don del temor no se me había otorgado. Ahí lo tenés: hecho y derecho.
Lo que veo se pone pálido como la merca, como la muerte.
Cómo pasa el tiempo mientras uno se besa. Pasa así.
Estuviste besando a alguien y el tiempo no está. Te agiornás a la hora después. Pasaron seis horas. "En este mundo", pensás.
Qué lindo tenerte y besarte. Está bueno, no podés hablar. Es genial...

Sergio A. Iturbe
18/10/06